Amor mío,
Los acontecimientos han dejado pasar de largo lo mal que me porté el sábado no sólo contigo, con mi hermano también, pero ahora no hablaremos de él.
No quiero que estés con dudas sobre esa noche. Es cierto que desconecté del mundo, que no pensé en nadie, sólo en mí y pasármelo bien. Pero entre Carlos (él es de las pocas personas que sabe que estamos casados) y yo no pasó nada más que pasamos una buena tarde, nos reímos, bebimos más de la cuenta y me puse mala con la tripa. Él se asustó mucho pero se portó muy bien conmigo. Definitivamente es un buen tipo.
Y se que no me has pedido explicaciones, y no trato de justificarme, pero tal y como sucedieron las cosas si hubiera sido al revés yo estaría pensando muy mal, por eso a pesar de que no puedo volver el tiempo para atrás, ni hacerte olvidar esa noche quiero pedirte perdón. Siento mucho todo lo que está pasando, pero a pesar de todo yo lo único que deseo es estar contigo y verte cuanto antes, y disfrutar de nosotros. Anoche me hacías tanta falta mi vida....
Mi vida ahora voy a prepararme para ir al médico de las rodillas y luego a hacer unas compras. Espero que Internet aguante y poder vernos esta noche.
Te amo con toda mi alma.
Tu niña.
jueves, 30 de abril de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario